Bodegas Murviedro pertenece a la Bodegas Schenk que se fundó en Suiza en 1893 de la mano de Arnold Schenk que heredó de su padre la pasión por el vino y la tierra. A día de hoy, más de 125 años después, la empresa sigue siendo propiedad de la misma familia y mantiene los valores tradicionales sin perder la esencia de una empresa familiar.
En 1927 Bodegas Schenk instala filiales en España, la primera de ellas en Vilafranca del Penedès, Cataluña, bajo el nombre de ‘Schenk España’.
En 1929 abre bodegas en Alicante, Utiel y Requena, bodegas jóvenes que apostaron inicialmente por el vino a granel de ‘calidad’, seña de identidad hasta nuestros días.
En 1931 Schenk España decide concentrar sus actividades en la bodega de Valencia que, situada junto al puerto, fue el comienzo de uno de los pilares fundamentales de la marca: las exportaciones.
En 1997 Schenk España cambia su sede, acercándose al pie de las viñas, a Requena, en el corazón de la Denominación de Origen Utiel-Requena, productora de vinos de excelente calidad.
En 2002 aprovecha la celebración del 75 aniversario para pasar a denominarse ‘Bodegas Murviedro’, en honor a su vino Cavas Murviedro, una de las marcas de vino más emblemáticas de la Comunidad Valenciana y que convirtió a Murviedro en una de las bodegas más reconocidas.
En 2010 se centra en apostar por variedades autóctonas, las mejores embajadoras de nuestro país y en potenciar los viñedos de cepas viejas creando vinos ligados al terruño, con caracteres únicos que muestran un perfil diferenciador.
Y en 2017 celebra el 90 aniversario. Funda su ‘Bodega Histórica’, en el casco antiguo de la ciudad donde elabora el vino premium ‘La Casa de la Seda’, dando un paso más hacia lo que quiere que sea su futuro, apostando por la variedad Bobal y sus raíces. Apostar por su zona y que sea esa su seña de identidad.